👉 Se ha publicado recientemente un interesante estudio en el que los autores han evaluado los factores predictivos de rendimiento y las respuestas fisiológicas en subida y en bajada en un grupo de 10 corredores de trail de muy buen nivel (VO2max: 70.4±6.3 ml/min).

🔍 Para ello, sometieron a la muestra a una prueba de esfuerzo incremental sin pendiente, diferentes test de fuerza y agilidad y dos test de campo de 5 km a máxima intensidad (en el mismo circuito, con 400m de desnivel positivo/negativo y un rango de pendiente de 8±4%). Entre las principales conclusiones que arroja el estudio, encontramos las siguientes:

  • La velocidad aeróbica máxima (pero no el consumo máximo de oxígeno) fue el mejor predictor de rendimiento en subida y el segundo en bajada. Parece, por tanto, que debería ser una variable muy a considerar tanto en el entrenamiento como en la evaluación de los corredores de montaña.
  • La fuerza máxima dinámica fue el mejor predictor de rendimiento en bajada y el tercero en subida. Del mismo modo que la VAM, parece que la FMD juega un papel determinante en el rendimiento del corredor de montaña, especialmente en las bajadas.
  • La reactividad del tobillo aparece como el tercer factor predictivo de rendimiento en las bajadas, y por tanto aquellos ejercicios encaminados a su mejora también deberían ser parte importante del entrenamiento del corredor de montaña (ya que, además, en llano hay una extensa evidencia sobre su relación con la economía de carrera).
  • En el test en bajada, a pesar de alcanzar valores de VO2 significativamente menores que en subida, los corredores mostraron valores similares de FC y lactato pico, y un patrón respiratorio más superficial (mayor frecuencia respiratoria, menor volumen tidal).

🎯 ¿Podría constituir el entrenamiento inspiratorio una buena estrategia para mejorar ese patrón respiratorio en las bajadas e incrementar la eficiencia ventilatoria? Quizás sí!

🧩 La ciencia sigue ayudándonos a replantearnos e intentar mejorar el «día a día» del entrenamiento!!